Todo lo que percibes en esta Vida
Nada puede detener el sol nadie puede retener el aliento más de unos pocos minutos, nadie puede volar como las aves sin ayuda, nadie puede escapar de la realidad por mucho tiempo.
La vida está hecha sin más, puedes vivirla atemorizado pero lanzado hacia adelante, o puedes intentar por todos los medios posibles retenerla para que no pase el tiempo. No es posible, la vida no es ni valiente ni cobarde simplemente es y se manifiesta completa sin reparos ni arreglos, no es ni cálida ni fría, no tiene potestad sobre las almas, solo acciona y reacciona a los propósitos naturales.
Si cada uno de nosotros se abocara a lo que realmente es, sin enmascarar nuestra naturaleza sin inmiscuírnos en otros roles o forzarlos, sin intentar tapar los errores inculpando a alguien más, simplemente aceptándonos y aceptando todo el entorno social natural como parte de la nuestra; interconectados directamente de manera que lo que sabes hacer lo hagas a consciencia, ¿Lo que no? Lo aprendas si es de tu real interés ¿De no ser así? Deja que alguien más ocupe el lugar, sin resistencia ni egoísmo.
Puedes acelerar tu entrada al recinto o puedes retrasarlo con todas tus fuerzas, pero lo que ha de ocurrir ocurrirá sin tu permiso o con tu aceptación.
Somos los dueños de nuestros actos recolectando experiencias, somos los inquilinos de un cuerpo, los vecinos del entorno; pero no somos dueños de nada más .
Creer que se es dueño de inmuebles, o de tierras o de títulos nobles; es solo ilusión. Todo quedará aquí para el próximo inquilino te guste o no, nada podrás hacer en contra de ello. Lo que está destinado a ser será y tú solo puedes aprender a compartirlo o morir retorcido de dolor o ira por tener que dejarlo o compartirlo con alguien más.
Acepta que la vida es y seguirá, así como tú seguirás en otra aurora, en otro espacio, en otra hora; pero serás siempre tú y todo lo que puedes llevar contigo es tu única y propia experiencia de existencia.
¿Para que sufrir por lo que no tiene remedio? Suelta… O aprende a soltar antes que te mates solo intentando transformar las cosas para mantenerlas en tus manos o bajo tu poder.
Al menos podrás sentir la gracia al haber sido fiel a tu propio ser, sin sentir vergüenza de tu intento de ser otro titiritero humano. JP.
Árbol en tierras Salvajes 